LA REANIMACIÓN Y ALGUNAS VIVENCIAS MÁS DENTRO DE LA U.C.I.
Descripción del Procedimiento -El cirujano hace una incisión en la piel y el esternón, abre el tórax y lo conecta a una máquina cardio pulmonar. Esta máquina realiza la función del corazón y de los pulmones durante la operación.El cirujano detiene el corazón, hace una incisión y retira la válvula dañada. Se sutura una nueva válvula en su lugar y se revisa que abra y cierre apropiadamente. La incisión en el corazón se cierra y el corazón vuelve a funcionar. Una vez que el corazón esté funcionando bien, se le retirará de la máquina cardio pulmonar y se le cerrará el tórax con cables. La piel se cerrará con suturas absorbibles.
Podeis leer más aquí sobre todo el tema del procedimiento quirúrgico
(Para los morbosos, claro)
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En mi caso la sutura exterior fue con grapas. Una vez me quitaron el drenaje pude comprobar que semejaba a una cremallera de las baratas y un poco torcida.
El despertar fue desagradable porque no podía respirar en condiciones. Sentía un objeto extraño en las vias respiratorias. Lo comenté con una voz que no parecía la mía. Una de las enfermeras me tranquilizó y fue dándome instrucciones para respirar despacio, sin esforzarme. Procedieron a quitarme el objeto que me impedía respirar bien. El tema duró menos de un minuto, pero lo pasé fatal, con una sensación de ahogo y angustia. El aire comenzó e entrar en mis pulmones y me fuí tranquilizando. Los ojos me pesaban. La misma enfermera me animó a mirarles.... abrí los ojos y obvervé a tres personas frente a mi. Dos enfermeras y un médico que me saludó por mi nombre y me comunicó que la intervención había resultado perfecta. La nueva válvula funcionaba correctamente, pero no debería hacer ningún tipo de esfuerzo. Todo lo que necesitara debería comunicárselo a las enfermeras o auxiliares de la U.C.I, que estaban pendientes de los monitores y la marcha de los pacientes ingresados en esa unidad.
Traté de situarme físicamente. No recordaba nada, aparte del viaje de la cama camino de la sala de quirófanos y algún comentario que me hizo el auxiliar. Intenté mover la cabeza. No veía la herida de la operación y mi sorpresa era grande al no sentir ningún tipo de dolor. Nada en absoluto, salvo una molestia en la muñeca, debido a una vía que me abrieron para conectar el suero, los antibioticos y más cosas que me fueron suministrando. Al mover el cuello noté una pequeña molestia en la zona de la yugular. Ahí tenía otra vía con mas medicación conectada. Acerté a ver de lado uno de los monitores a los que me tenían conectado. Observé que marcaba las pulsaciones, el ritmo cardiaco, la tensión y otros parámetros que desconocía. Las pulsaciones eran un poco más bajas de lo habitual en mi. Siempre tengo unas pulsaciones que no pasan de los 66, 68. Esta vez apenas llegaban a 60. El ritmo cardiaco era constante y sin sobresaltos..... pensé que había sobrevivido a la única intervención quirúrgica importante de mi vida.
Seguí observando mi entorno. La UCI era rectangular, con las camas en compartimentos pegadas a las peredes y todas con sus correspondientes tomas de todo tipo de urgencias, oxigeno, monitores y demas. y podía ver a los enfermos situados en la parte de enfrente. Tan sólo había dos. Uno de ellos con la puerta cerrada, el otro despierto y mirándome me saludó con la mano. Se notaba que era veterano y con una operación menos importante. Intenté responder al saludo pero apenas podía levantar el brazo con tanto cable. Después observé el trajín de las enfermeras y auxiliares, controlando las medicaciones y preparando el cambio de turno. Mi operación había durado algo más de 3 horas, casi 4 según me comentaron después.
Vi entrar a mi pareja guiada por un médico. Sólo disponía de unos minutos para verme, porque mi estado era de reciente reanimación. Me comentó haberme visto antes, recien salido del quirófano. Sabía que no lo estaba pasando bien....estaba sola en el hospital y sola se quedó todos los días que duró mi hospitalización en la UCI. Algunos familiares vinieron, pero no llegué a verles hasta días después.
En ese estado de indefensión, dependiente de una serie de aparatos electrónicos que controlan hasta el ritmo de los medicamentos que van entrando en tu cuerpo vía intravenosa, eres consciente del poco valor que tiene un hombre solo. Decía mi madre que "no hay hombre sin hombre", en referencia a que todos necesitamos el apoyo y la ayuda de los demás para sobrevivir en ciertos momentos, para mantener una sociedad en funcionamiento es necesario la aportación de todos sus miembros, aunque lo hagan inconscientemente, sin darse cuenta de lo que están aportando. Otros se aprovecharán de esas aportaciones en beneficio propio....pero es algo inavitable. A fin de cuentas no dejamos de ser una especie depredadora, incluso somos capaces de matarnos entre nosotros.
Curiosamente, ante la imposibilidad de moverme con libertad, mi mente pensaba estas cosas, quizás absurdas y sin importancia real. Otros al conocer mis pensamientos pensarían que estaba medio agilipollado más o menos. Hubo quien me preguntó cual fue mi último pensamiento al entrar en quirófano....¿pensaste en Dios, verdad?. La pregunta me desconcertó. ¿Por qué debería haber pensado eso?.... me limité a contestarle que en esos momentos me vino a la memoria un maravilloso polvo de hacía diez años. El creyente se cabreó conmigo. No entraba en su cabeza que no pensase en su Dios.
En esos momentos últimos de consciencia sólo pensaba en la soledad de mi pareja, en lo que estaría sufriendo durante la operación. A fin de cuentas yo no me enteraría de nada. Simplemente dormiría un sueño profundo y provocado por la fuerte anestesia.
La permanencia en una Unidad de Cuidados Intensivos es muy dura. Máxime cuando las cosas se complican un poco y la estancia se prolonga más días de los debidos, como fue mi caso. Durante esos días pude comprobar el tipo de trabajo que se realiza allí, las envidias y las críticas entre el personal, las personas que se entregan de lleno a su profesión porque aman lo que hacen, la desidia de otras por dejar pasar el tiempo e intentar escaquearse de sus tareas. El submundo que existe en un hospital y las miserias humanas que se arrastran. Los amiguismos y favores a ciertos enfermos muy recomendados por ciertos médicos........ la tremenda condición humana y su eterna comedia. Aquella UCI era especial por su estructura. Apenas perdía detalle desde mi posición. Pocas cosas se escapaban a la mirada.
Recuerdo haber despertado una de las noches sin saber donde estaba. Debieron darme algún medicamento para dormir, porque realmente me costaba conciliar el sueño. Pensaba demasiado. Al despertarme de madrugada no reconocí el lugar. Pensé levantarme pero algo en mi interior me decía que no me era posible. El panorama a mi alrededor semejaba algo bastante surrealista, la vista me engañaba y veía auténticos disparates confundiendo un reloj de pared situado frente a mi, en una de las columnas, con un rostro pegado que me miraba riéndose. El juego de luces a esas altas horas de la madrugada se prestaba a confundir sombras y objetos. Incluso me costo recordar mi personalidad ni qué me pasaba. Llegué a pensar que estaba en un lugar lleno de agua. Esa situación mental duró cerca de diez minutos. Moví un poco la cabeza y descubrí a uno de los enfermeros sentado en la mesa de control. Manejaba un ordenador portátil al lado de la pantalla de control general de los monitores. El escenario cambió. Recordé todo lo que mi cabeza se negaba a recordar.
Desde aquella noche me negué a tomar nada para dormir. Respetaron ese deseo. Esa decisión hizo que fuese testigo de algo que relataré al final de este medio culebrón.
(Continuará)
17 comentarios
Myrna -
en fin....... me alegro que todo haya salido perfecto y siga igual..
muacks
Incondicional -
Espero que sigas muy bien, te lo deseo de corazón.
Abrazos delicados y sanadores.
ana -
Coral -
El recuerdo a veces de lo ocurrido, el mantener la consciencia de cada momento, tambien ayuda a mantenernos sin perder la dirección, ayudan a guiar nuestros pasos.
En situaciones asi, ya es sabido que la realidad tuya o de cualquiera que pase por situacion semejante, debe cambiar, hay cosas que pierden su lugar en lo alto del podio personal y otras que suben a lo mas alto.
Que todo esto te haya humanizado mas, si cabe, y nos ayude a los demas a ser mas realistas a la hora de fijar nuestras prioridades.
Espero con impaciencia la continuación, y con morbosa curiosidad, el final.
Un saludo y besos.
Naiba -
La verdad que es duro por todo lo que has pasado, hoy me has traido a la cabeza el recuerdo de mi padre, un virus después de 13 meses de hospitalización en la UCI, acabó con su vida.
Te tengo que felicitar Fermín, tú hoy lo puedes contar, yo me quedé sin padre y sin mi gran amigo.
Besos y Feliz fin de semana.
María José -
Llegué hasta aquí toda animada yyyyyyy.... ¿Cuándo continuará? Vaya con esto de los capítulos, en fin, que tendré que volver para enterarme de como siguen los acontecimientos, mientras tanto que tengas un feliz fin de semana y hasta pronto
Dulcinea -
Ottinger -
ABRIL -
Un beso....ABRIL
Morgane -
La segunda es que aún estando en una situación extremadamente crítica, tu corazón se preocupa por quien te ama y te acompaña, más que por tu propio bienestar. Se te ven las orejas de lobo excepcional, je je
Por último, siempre he pensado que existen profesiones que consideramos deben ser practicadas más como una vocación que como un oficio. La medicina, la enseñanza, la "justicia", todas aquellas que implican la salud física y mental del ser humano, desde la infancia hasta la senectud.
Cuando en realidad para muchos se trata de una labor diaria y monótona, que sirve como otra cualquiera, para ganarse el pan. Sé bastante de hospitales, he encontrado a profesionales con una humanidad verdadera y a otros que tratan al "cliente" como si estuvieran montando piezas en un fábrica. Sigue indignándome esa postura, pero he aprendido a no callar y a exigir que se me atienda y atiendan a los míos como se merecen, o sea como a seres humanos.
Por lo demás, consigues que tu experienca nos alcance las vávulas y las arterias del alma. Besos grapados de admiración. Morgane
bandida -
después de leerte, a ti y a los que han comentado aquí, me reafirmo en la creencia de que las personas somos mucho más fuertes de lo que pensamos, que con ganas de salir adelante se tiene la mitad del camino hecho, así que, a por ellos
Dorinda -
Un beso
Gloria -
Espero la siguiente parte,que no me llamará la atención porque el hospital,como todo colectivo,es así.
Un beso y bueno que ya pasó todo.
Gloria
Mareablanca -
Oleadas de besos.
Shi -
Mi gran problema es que no solo recuerdo el posterior, que entiendo sus tejemanejes por que en un tiempo de mi vida trabaje en un hospital, pero para mi resulto muy traumatico o no lo entendia, como gritaba, llamaba por el nombre de quien lloraba, me hablaba, o me insultaba como mi suegrá, o me decia que ya me dejara de chorradas que me muriera ya que dejara de hacer el ganso, mi madre vamos, o las lagrimas dulces de mi marido, y los aupas contandome sus cosas de amigos. Pero claro estaba en coma, y según los medicos eso es imposible que una persona en ese estado recordase, lo escribi, que es la unica manera o la mejor de que quede constancia, y nadie se explicaba como podia recordar eso.
El problema ejke también recuerdo cada charla en un quirofano las llamadas que recibieron allí, la primera vez no me creian, y hize lo mismo, escribi lo que recordaba o lo que yo creia que soñaba, y bueno, solo sonrieron, no me dieron mucho credito, aunque hubo quien se apresuro a cambiar informes a toda pastilla, y a falsificarlos.
En otras de las
siguientes operaciónes, vamos unas de las que no me hicieron equivocadas, que con lo cara que es la seguridad social, a una la premiaron incluso con tratamientos, que no eran para mi, pero en fin, lo que el medico mata, la tierra lo tapa y si eres creyente el cura lo bendice.
Recuerdo en una de las oficiales, que habia dos medicos uno sabia quien era, y el segundo hizo un comentario referente a mi, y recuerdo como le dijo: Callate esta es de las qeu se enteran y luego te lo casca, con sus cachondeos y burlas.
Y asi lo hice cuando vino a verme a la habitación, se lo comente. Y no veas con que careto me mira cada vez que me cruzo con el por la calle.
Te animo a que sigas contando, es muy interesante.
Cienes de besitos pal andando y cienes de y pico de abrazos.
Shi.
MDM -
Hace años, mi padre que estaba en una cama del área de preingreso creyó oir dentro de los conductos del aire acondicionado algunas voces tramando inyectarle algo para quitarlo de en medio.
Cuando la enfermera se acercó para ponerle en la via un medicamento, estuvo a punto de agredirla, se arranco las via y tiró todo el material que le rodeaba.
Los médicos me explicaron que se daban esas situaciones, muchas veces provocadas por el aislamiento y los efectos secundarios de las sustancias con las que están siendo estabilizados. También me explicaron que estaban de obras en el piso superior y que provablemente había escuchado algo que su cabeza había procesado en sentido contrario.
Es verdad lo que dices, la sensación de indefensión es tremenda, sabes que tienes tu vida en sus manos y que ellos son personas como otras cualquiera y por tanto susceptibles de cometer errores, que estos casos son fatales.
Espero que siga tu mejoría.
Un abrazo flojito, pero cariñoso.
:-)
Incondicional -
Me alegra leerte con tan buen sentido del humor, estoy segura que superarás cualquier crisis, la actitud positiva es el mejor medicamento y mucha risa eh?, espero contribuir a ello ;-)
Un abrazo con cuidadín, por las grapas :-)